Entradas

Mostrando entradas de abril, 2013

Juntos o separados, somos felices.

Imagen
Entro en la oscura habitación, pongo el volumen de la radio a todo volumen y miro por la ventana, pienso en que estarás haciendo. Los días pasan rápido, incluso cuando estabas a mi lado. Ya no sé en que día, mes o año vivo, he perdido la cuenta de cuantos besos te habría dado hasta ahora. Pero anoche me paré un momento a pensar y caí en la cuenta de que lo mismo fuimos demasiado rápido, que el tiempo no estaba a nuestro favor, que nos corresponde otra etapa de nuestra vida y no la que quisimos vivir. Otras personas aparecen en nuestra vida, de forma intencionada o no, formarán parte de un capítulo de nuestro libro. El libro de nuestra vida, separados o juntos, ya tenemos nuestro capítulo. Un capítulo que, para mí, no ha llegado a su fin. También, me dí cuenta de que, al final, todo en esta vida se reduce a atrevernos a luchar por lo que queremos o a resignarnos a perder cosas que nunca hemos tenido. Poco luchamos, por eso perdimos.

Soledad.

La soledad es fría. Me siento ausente, vacía.. No puedo mirarme al espejo sin preguntarme a mi misma si soy la misma, si sigo siendo yo. Las horas pasan delante de mis ojos, desde el amanecer hasta el atardecer; cuando la luna y las estrellas iluminan mi habitación, en mis oídos lo único que se escucha es la música, lo único que hace sentirme viva.  Cuando llaman a la puerta de mi habitación y entran, me hago la dormida; no quiero ver a nadie, sólo quiero quedarme en la oscura habitación. En el armario sigue la pulsera que me regalaste, no puedo mirarla ni tocarla sin sentir un fuerte escalofrío por mi piel. Esa pulsera con la que me dormía abrazada a ella porque me faltabas tú, porque no estabas en mi cama aquellas noches que más te necesitaba. Aquellas noches donde la soledad y la tristeza se hacían insoportables. Sabía como eras pero aún así quise estar contigo, pero no me explico porqué esos malditos sentimientos no han desaparecido aún, es como si esperaran una esperanza que nunc