¿Vas a vivir toda tu vida con miedo?


Si vives con miedo, realmente no vives. Cuando nos sentimos indecisos surge el miedo a fallar, a equivocarnos.  A diferencia del miedo, la felicidad está ahí para nosotros todos los días pero debemos encontrarla por lo que la mayoría de las personas no se molestan en buscarla y quedan atrapados en momentos que no importarán en una semana y mucho menos en un mes o en un año. El miedo, sin darnos cuenta, puede alcanzar niveles más altos que nos hace parar en algunos momentos. La sensación de miedo, duda e incertidumbre desaparece y es superado por un sentimiento de poder y confianza; y la mejor forma de hacerle frente al miedo es teniendo voluntad, tomar el control de nuestras vidas, ver lo que realmente esta pasando, vivir el momento y ser conscientes de que lo que pase es lo que tenía que pasar.

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